lunes, 28 de septiembre de 2009

Duelo Neuronal IV (espero se escriba así) por si acaso 4





En badenes de melancólicos recuerdos

Pita peñascos con sangre el cerebro

Sin pluma conocida sólo lamentos

No hay viuda ni familiares

Una muerte más en silencio



Ahora lejano interpreto

Sólo discuto conmigo entre gladiolos

Olor de flores marchitas, aire espeso

No llora nadie ni siquiera yo percibo el momento



Sí señor han muerto

Cada una de mis neuronas

Por eso este duelo neuronal

Dónde sólo yo participo

Dos neuronas poseo



Una en el corazón

Otra en los genitales para seguir perdiendo









Los derechos son míos ahora no creo nadie copie

¡No ofenda la literatura copie algo bueno!

Jjjajajajajj

domingo, 20 de septiembre de 2009

Felicidades

Busqué entre todo lo que me pertenece algo que te pudiera otorgar, intenté encontrar sonrisas para alegrarte el alma, hurgué para hallar suspiros y abrazos pero el aire y mis manos estaban vacíos. Me acurruqué en un rincón, porque incluso el trozo de alma que pensaba enviarte, había desaparecido del cofre donde lo guardaba, junto con un pedazo de corazón que te tenía reservado.

Me quedé con las manos vacías y una lágrima empezó a rodar. ¿Qué podía entregarte entonces, si todo aquello que considero de valor había desaparecido?
Pero entonces en medio de la oscuridad, me di cuenta, que todas mis sonrisas las he gastado cuando comparto contigo instantes que parecen eternos, el aire y mis manos me recordaron que a centenares te he brindado mis suspiros y mis abrazos.
Y que los trozos de alma y corazón te los entregue en el momento preciso en el pude llamarte Amiga.
Feliz cumpleaños Clau.

sábado, 5 de septiembre de 2009

Chis Chas








Chis..........Chas.............
acaricio con la suela el rastro de la lluvia
no es depresión o melancolía
se antoja gris la tarde, asi el sol estuviese silbando

Chis..........Chas.............
sin movilidad, enjugo mis bruces con la tierra
la columna carece de vértebras felices me sostengan
un delirio infame.....salida peremne y ridícula

Chis ..........Chas............
Se antoja sea noche, así cegara con calor una estrella
el alma se evapora mientras lágrimas condensan
forcepcs invisible el pasado repetitivo

Chis..........Chas.............
Porque se antoja sea oscuro
paredes de tierra, el techo nunca gotea
tosca como tejas.....cruz en ves de chimenea

Chis...........Chas............
Un error último.......porque se me antojó
lamer el filo de la daga oxidada con dolor
para descubrir que......vivo en pasado
todos los días..... tomo en mis brazos tu alma desarticulada
todos los días.....entre mis dedos la mejilla fría, sin nada
todos los días.....baño tu pelo con humedad salada
todos los días.....grito tanto que rompo la arena del asfalto
todos los días.....Chis..............Chas.............

Muerto.........Todos los días....Revivo tu muerte......de la que escapé matándome

Todos los días..........no se me antoja sufrir. Lo hago por decisión del dueño de casa
Todos los días..........sin observar, acariciar, sentir, soñar....sin verte
Todos los días..........repito dolor...........resumo nada
Todos los días..........así lo quiere el Maldito dueño del infierno te recuerdo

viernes, 4 de septiembre de 2009

Antes del funeral


¿Lo percibes?
inquietante el paseo antes del funeral,
frente a esas estátuas que parecen decir
¡No pasar!

Entre excusas de piedra reventadas de musgo,
arrumacos de hiedra, ecos, susurros...

Si hasta el suelo se turba,
huele a tierra húmeda,
se conmueven las manos y se aferran,
dedo a dedo, crispando la atmósfera.

Aún no tañen campanas, ni se escucha la pala,
no han tallado las letras plateadas,
no, nadie sabe el nombre que irá en la lápida,
sin embargo ya vienen, ya, el cortejo y la Parca.

¿Serán esas las ánimas?
las que acuden nocturnas al borde de la cama,
las que arrastran cadenas como Santa Compaña
cuando en noche sin luna murmurean sus Réquiem,
ese rezo cansado, esas voces lejanas.

¿Lo percibes?
Pues yo siento un gemido y no es el del viento,
veo la sombra del filo, la presiento,
sangrienta, alargada, en guadaña.

Entre verdes y ramas,
junto a estatuas,
agrisadas, pétreas, fantasmas,
en la tierra aún no excavada,
bajo losa sin nombre,
veo mi alma.

¿Alguien al otro lado?


Hubo un alarido pusilánime en el viento,
triste, timorato, frágil cuando le inhalaron,
respirado a traición por su cobardía,
no dijo nada, se deshizo en pedazos
y fue susurros a media voz.

Aquella vez no hubo súplica,
¿dónde y a qué?
si era llanto resquebrajado
a nadie importó su penuria,
el lamento quedó apagado.

Se descolgó de la boca que lo rezumaba,
cayó como sangre pétrea golpeando el suelo
y no hubo mano que lo sostuviera.

Ancló su eco a una grieta,
hizó dos velas,
se creyó nave y partió,
olvidó sus pies, no dejó huella,
se hizo de sí mismo nigromante
y suicida se invocó...

¿Alguien al otro lado?

Nadie respondió,
naufragó en una noche de tormenta
y tampoco nadie lo escuchó.