Invisibles son los barrotes
que me encierran en un mundo de tinieblas.
Gruesas cadenas negras
me anclan a oscuros muros de piedra,
se clavan en la piel… la desgarran…
El acero deja llagas que lentamente se desangran
…las cicatrices van desfigurando mi alma.
Mi cuerpo ya es sólo una masa deforme,
torturada la carne en ulceras sangrantes.
Un tenue rayo de sol se filtra entre las garras
lóbregas que me atan.
Pero la luz no me alcanza…
Ya no siento nada…
Espumita de mi alma, esto te lo debo a tí, fuiste tú quien me inspiró.
ResponderEliminarSé que "La jaula" original está en el blog de pensamientos, pero quise subirlo a nuestro portalito familiar, je, je.
He subido a los blogs cositas de mi arconcito... es que se me atragantan las palabras y nada sale, pero quería estar en familia.
Aunque no pueda subir nada nuevo... quería estar en casa...
Los amo familia de mi corazón!!!
Estás en familia Patyta.
ResponderEliminarAquí siempre hay una caricia para tu carita de luna y una almohada llamada hombro.
Te queremos Azulita.
Linda letra siempre.
Muáck!
Toma la llave de la jaula, yo te la entrego
ResponderEliminarCamina hacia afuera que te estoy esperando con los brazos abiertos
Te quiero, siempre a tu lado, te cuido, te protejo y te quiero
Besos hermanita