viernes, 31 de octubre de 2008

No fuiste… no eres… no serás…



Qué fue lo que pasó?

Qué provocó esta tortura?

Será la inexistencia de la presencia,

o la presencia de la inexistencia?



El cauce del río giró bruscamente

y no te diste cuenta.

Cuando volviste tu mirada

Nada había…

O será que te lo creíste

y en realidad nada existía.



La lanza del tormento te atravesó,

se instaló en tus entrañas…

Tu cuerpo albergó un inmenso dolor.



Derramaste ríos de lágrimas.

Su sal provocó las grietas

que sangraron hasta dejarte seca.



El corazón en carne viva

Ya no sentía

Ya no latía…



Y arribaste a una conclusión



No fuiste…no estuviste

No eres.. no estás

No serás… no estarás…



Dejaste de existir…



2 comentarios:

  1. Veo que les ha gustado un tanto la inmersión en las penumbras. Me da gusto que también ennoblezcan la letra negra. Gracias Patyta.

    Gracias a todas las nenas.

    No fui porque el espectáculo me retuerce mis alitas negras.
    No soy porque no he logrado transformarme en sombras.
    No seré porque aún perdido,
    no encuentro la tiniebla en mis palabras.

    Bechu!

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